Brasil tiene 189.600.000 de habitantes de los que 70.000.000 pertenecen a las clases A-B. Las transformaciones económicas y sociales actuales indican que los 120.000.000 de habitantes restantes cuentan con posibilidades crecientes de acceder a niveles de poder adquisitivo superiores. Esta constatación presenta un mercado muy atractivo y con buenas perspectivas de crecimiento del consumo interno con respecto a cualquier tipo de producto. Es necesario comprender que el “continente Brasil” está dividido en Estados (26 Estados y el Distrito Federal) con leyes y oportunidades diferentes entre sí. Por eso cuando se habla de Brasil es como si se hablara de 27 países con características económicas propias y problemáticas diferentes. Otro aspecto muy importante es la composición de la población brasileña porque históricamente el país fue poblado por inmigrantes que se concentraron especialmente en las regiones centro-sur. Descendientes de portugueses, alemanes, polacos, japoneses, ucranianos e italianos forman la fuerza de Brasil, aspecto que facilita los contactos comerciales con países de culturas más próximas y coloca al país en una situación de ventaja con respecto a los otros integrantes del grupo denominado BRIC, cuyas diferencias culturales son mayores.
Brasil abarca 8.500.000 kilómetros cuadrados (2,2 veces el tamaño total de la Unión Europea incluyendo sus 25 países miembros y 28 veces el tamaño de Italia). Por su extensión ocupa el quinto lugar entre los países más grandes del mundo.
Brasilia con 2.600.000 de habitantes (estimativa oficial del año 2012)
Brasil es una república federal compuesta por 26 Estados y el Distrito Federal. Por su desarrollo industrial y económico podemos dividirlo en 4 regiones principales:
Brasil es un país de población joven compuesto por 194.000.000 de personas. El 75% del total de sus habitantes vive en ciudades y actualmente existen 14 ciudades con más de 1.000.000 de habitantes.
Tropical y subtropical. Templado en el litoral meridional y en las regiones de mayor altitud.
Portugués
70% de los brasileños pertenecen a la iglesia católica, 19% son protestantes y el resto de población profesa otras religiones.
La moneda oficial es el Real (BRL, R$).
Los recursos naturales abundantes colocan el país en una posición de ventaja competitiva mundial especialmente en los sectores de producción agrícola y de materias primas, inclusive de hierro y acero. Entre los productos agrícolas y ganaderos se destacan la soja, caña de azúcar, naranjas, tabaco, cacao, café, carne y pollos. La importancia de la producción de alimentos se encuentra estrechamente ligada al desarrollo de la industria alimenticia y del sector agrícola. Brasil cuenta con una base industrial sólida y diversificada que abarca desde la ingeniería pesada hasta los bienes de consumo, principalmente concentrada en la región sudeste del país.
La región sudeste, una de las cinco “macro regiones” de Brasil (Sur, Sudeste, Centro Este, Noreste y Norte) representa la fuerza económica conductora y está formada por los Estados de Espírito Santo, Minas Gerais, Rio de Janeiro y São Paulo. Estos Estados producen el 50% del PBI brasileño aunque actualemtne el crecimiento más acelerado se registra en los Estados que forman la región Centro Occidental, siendo ellos el Distrito Federal (Brasilia), Goiás, Mato Grosso y Mato Grosso do Sul.
Si bien su porcentaje de participación en el PBI está disminuyendo gradualmente, el Estado de São Paulo conduce la producción industrial y manufacturera del país. En los últimos años también se ha registrado el desarrollo de diversas actividades industriales en los Estados de Minas Gerais (automotriz, acero), Bahia (petroquímica, industria de papel y calzado),Paraná (automotriz), Pará (minería y aluminio), Rio Grande do Sul (petroquímica) y Espírito Santo (acero). El Estado de Rio de Janeiro registró un crecimiento constante en los últimos tiempos en gran parte debido al desarrollo de la industria petrolífera. La empresa Petrobras, líder mundial en producción y explotación de petróleo en aguas profundas, posee su sede administrativa en la ciudad de Rio de Janeiro.
La economía brasileña está luchando contra la crisis mundial que en tiempos globales como los nuestros no deja nadie inmune. Los indicadores son todos positivos aunque ya comienzan a encenderse algunas luces rojas. El producto interior bruto (PIB) o producto bruto interno (PBI) seguirá creciendo durante los próximos años y la inflación estará bastante controlada (5,7% en 2012). En cambio, lo que empieza a preocupar es la disminución de la producción industrial que comparada con el período anterior cayó un 3%, reflejando una pérdida del mercado debido a su baja eficacia.
Brasil siempre ha sido un gigante proveedor de materias primas pero, en contrapartida, es un productor de bienes industrializados muy pequeño. El comercio y los servicios, sectores más importantes para la composición de su PIB o PBI, siguen creciendo y constituyen el verdadero acelerador de la economía. Las maniobras fiscales continuas (exenciones) para incentivar el consumo ayudan al comercio que se alimenta con la expansión del crédito. Normalmente se dice que cuando un país crece el primer indicador que lo refleja es el de la construcción y actualmente Brasil es un cantero de obras donde se construye de todo, desde residencias populares a aquellas de lujo, infraestructura federal como puertos, aeropuertos y ferrovías, infraestructura estadual como hospitales, escuelas y líneas de subterráneos. Eso sin olvidar las obras relacionadas con el campeonato mundial de futbol del 2014 y las olimpíadas en Rio de Janeiro del 2016. Así, es un país con una verdadera explosión de infraestructura y de construcción, con expansión del consumo y con una desocupación del 4,9% (1.200.000 de personas desocupadas). Dirigir todo esto es una tarea pesada que necesita de competencia y programación. La estabilidad política de la última década indica que Brasil tiene las condiciones apropiadas para vencer este desafío. El tiempo lo dirá.
GDP (Gross domestic product): R$ 4,143 trillion or U$ 2,367 trillion* - (2011)
GDP per capita: R$ 21.252 or U$ 12.144* - (2011)
GDP evolution: 2,7% (2002); 1,1% (2003); 5,7% (2004); 3,2% (2005); 4 % (2006); 6,1% (2007); 5,2% (2008); - 0,3% (2009); 7,5% (2010); 2,7% (2011).
GDP Growth: 1% (2012)
Investment rate: 19,3% of GDP (2011)
Savings rate: 17,2% of GDP (2011)
Labor force: 104 million ( 2011)
Inflation (IPCA): 6,5% ( 2011) 5,7% (2012)
Unemployment rate: 5,8% (may, 2012)
Central Bank of Brazil basic interest rate (SELIC): 7,25% per year (December, 2012)
National minimum wage: R$ 622,00 (2012) U$ 674,00 (estimation 2013)
External debt: US$ 297 billion (2011)
Exports: US$ 256,041 billion (2011)
Imports: US$ 226,251 billion (2011)
Balance of trade (2011): US$ 29,790 billion (superavit) –Growth of 47,8% (compared with 2010)